En el artículo de ésta semana, denominado Heroínas, Brujas y Vampiras del cine fantástico: una aproximación ecofeminista(Navarro, E), encontramos una serie de ideas y conceptos que parten de la relación que se ha establecido entre hombres y mujeres en el cine de los años 80, entendiendo su origen en los relatos clásicos.
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Villanas de cuentos clásicos |
Para llevar a cabo este análisis, nos vamos a quedar con una idea específica, la de cultura, naturaleza y mujeres, ya que respecto a nuestro producto cultural, Origen, guardan mas relación.
Como explica el artículo, cultura y naturaleza, es la oposición que se ha utilizado en la cultura moderna para definir que rol es asociado con cada género.
Durante mucho tiempo, la sociedad ha otorgado funciones a las mujeres que la asocian al concepto de naturaleza, que se definen en ser raíz, seno, vientre, origen de la vida, y también salvajes, exóticas, peligrosas y necias, que necesitan un control, algo contra lo que hay que luchar.
Mientras, que el concepto cultura ha sido asignado a los hombres, es decir, son la razón, el progreso, que suaviza y endulza la rebeldía de la naturaleza.
Esta distinción que hacen entre mujer/naturaleza, y hombre/cultura, tiene base en la capacidad reproductora de las mujeres, mientras que la definición de los hombres, tiene sentido respecto al rol del hombre como dominador, de la naturaleza (mujer).
Esto nos hace reflexionar acerca de la aniquilación simbólica que sufren las mujeres frente a los hombres. Esta aniquilación tiene sentido en tanto que se trata de una situación generalizada de marginación, opresión y subordinación como algo natural, algo propio de una cultura menos civilizada y desarrollada.
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Escena del Diablo viste de Prada, cuyo personaje es un icono de poderío femenino. |
En el cine actual estamos acostumbrados a ver estas distinciones de manera natural, y aceptarlas como algo común y normal, aceptamos los roles femeninos de mujeres que se dedican íntegramente a su familia, cuidadoras y responsables de ella, y consideramos mal si no lo hacen, sin embargo, también vemos otro rol, el seductor, que precisamente es el que encaja con la protagonista de Origen, Mallorie Cobb, pero es un rol negativo y peyorativo.
Nuestra protagonista Mal Cobb es una mujer fuerte, pero el perfil que se muestra en la película de Nolan, es el salvaje, descontrolado, rozando la locura, y es la “enemiga a abatir”, que manipula a su marido, como podemos ver, todo es negativo, de hecho, el apodo que tiene en el film es La Sombra. Durante todo el film, Dom busca controlarla, tenerla tranquila, dominada.
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Escenas de Mal Cobb en Origen |
Podemos ver como el pensamiento patriarcal domina claramente todas las producciones cinematográficas en la actualidad, es algo con lo que tenemos que convivir diariamente, y pese que han sido conceptos y asociaciones creadas en sociedad y en una ideología específica, no logramos cambiar estas percepciones de manera rotunda.
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